Esta discoteca, según cuentan, era una filial (sucursal) de la conocida Scorpia Central del Sonido, al igual que Orbital. Siendo Central no llegué a pisarla, pero cuando fue Cybertrack si que estuve...
El cambio de nombre de Central a Cybertrack fue tan solo para poder seguir abierta y evadir (según cuentan) unos problemillas con el ayuntamiento de esa localidad, ya que después del cambio de nombre tanto el dueño como los clientes y trabajadores seguían siendo los mismos.
Después de cerrar como Cybertrack, pasó a ser una sala multiusos llamada La Mota, propiedad del ayuntamiento, que ofrecía conciertos, pequeñas muestras y exposiciones y alguna cosa más.
Poco después de cerrar definitivamente acabó en estado de abandono, comenzaron los actos vandálicos, y hasta el día de hoy que su estado es bastante lamentable y ruinoso...
Un par de zonas de abajo (sala privé y lavabos) no las fotografié, ya que el estado era muy malo, y sobre todo con un fuerte olor muy desagradable que tiraba "patrás"...
La planta de arriba
Lo que queda de la cabina de los Dj's
Terraza
Imágenes y flyers extraídos de distintas fuentes de internet









Reportaje realizado por:
-- Pablo Rodriguez S. --
Fotografías © Olvidado y decadente
Todos los derechos reservados
(Los flyers y las 3 imágenes añadidas al final de reportaje están sacadas de varias fuentes de internet)
Gracias por el ¿reportaje? Sea lo que sea, la elocuencia de las imágenes y los parcos comentarios producen una experiencia singular. Entre las muchas cosas que nos ponen en evidencia, nuestras ruinas dicen mucho de nosotros.
ResponderEliminarSoy un senil y novato escritor que se divierte construyendo una novela pornográfica. No erótica, sino asquerosamente pornográfica. Esta discoteca abandonada, que solo conocía desde el exterior, es el escenario de un par de escabrosos capítulos. Mi ficción es muy inferior a las oníricas imágenes que habéis publicado.
Vuelvo a mirar las fotos... No sé si es solo mío este sentimiento de contemplar el Partenón, las pirámides de nuestra civilización de chichinabo.
Mil gracias, de verdad.